Las luces de septiembre.

Hace una eternidad, en los peores días de la guerra tuve un sueño. En él, volvía a recorrer la playa del Inglés contigo. El sol se ponía y el islote del faro se distinguía entre la bruma. Todo era como antes: la casa del cabo, la bahía.... Incluso las ruinas de Cravenmoore sobre el bosque. Todo menos nosotros. Éramos un par de viejecitos. Tú ya no estabas para navegar y yo tenía el pelo tan blanco que parecía ceniza. Pero estábamos juntos.

Desde aquella noche, he sabido que algún día, no importaba cuando, llegaría nuestro momento. Que en un lugar lejano, las luces de septiembre se encenderían para nosotros, y que esta vez ya no habría mas sombras en nuestro camino.

Esta vez sería para siempre. 

El rollo de siempre.

Para algunos, la vida es galopar un camino empedrado de horas, minutos y segundos. Yo más humilde soy, y solo quiero que la ola que surge del último suspiro de un segundo me transporte mecido hasta el siguiente.

Odio que me hagan hablar cuando escucho música.

Que me tomen por tonta. Las falsas apariencias. Odio que la gente no vea más allá que su ombligo. Las etiquetas y complicar demasiado las cosas. Hay días en los que odio al mundo.
Puedo ser cabezota, orgullosa, celosa, impuntual, infantil pero también cariñosa, risueña, impredecible.
Me encanta tener a alguien cerca los días de tormenta. Meter el dedo en el bote de nocilla. Los besos en el cuello y que me susurren al oido algun te quiero. Me encanta tener a esas grandes personas, esas amigas por las que te sientes feliz al sonreír.
Me gustan las miradas que hablan, mirar las estrellas sin decir una palabra, el olor de una rosa, caminar descalza sobre el césped, saborear el helado.
Puedo decirte lo que siento a grito pelado hasta quedarme afónica, puedo susurrartelo al oído.
Puedo decirselo al mundo. Odio los kilómetros de mas y los días de menos.
Puedo tener mucho, muchísimo miedo y no aparentarlo. Puede que tenga demasiadas cosas en la cabeza y puede que ignoro demasiadas cosas pequeñas.

ella es la ola mas fuerte que choca contra las rocas. Mia siempre, CAQUE.

Ella es como una bocana de aire, el ultimo rayo de sol de una tarde,la primera estrella que se aprecia en la noche.
Eres los cinco minutos antes de despertar, la primera gota de agua de un dia de lluvia.
Eres la canción mas bonita de todas,la montaña mas alta,la sandía mas dulce y el pintalabios mas rojo.
Ella es lo mas bonito que tengo.

La quiero, y nunca me cansaré de hacerlo.

Y por cierto, me llamo Alba.

Vale, se supone que las presentaciones son lo primero pero esque me es imposible ser ordenada en la minima cosa.
He visto ocho veces como Jack Dawson moria en las frias aguas del Atlantico.
Me encanta el olor de una noche primaveral, deshojar margaritas y fiarme de su resultado, me enamoro de cualquier sonrisa blanca y verdadera, de una mirada brillante y expresiva.
Creo firmamente que absolutamente nada es para siempre, no creo en el universo infinito y a veces ni siquiera en Dios.
Prefiero lo salado a lo dulce, el verano al invierno, el campo que la ciudad, el bic que el pilot, el helado de yogur que el de chocolate, una cuerda trenzada a la pulsera mas cara de el corte ingles, Luanco a Madrid, una sonrisa que una rosa.
No soy rubia, tampoco tengo los ojos azules y de pequeña rompia las cabezas de las muñecas Bratz y luego las pegaba con tippex.
A sabiendas de que es probablemente imposible, me gustaria tener una historia con un final tan bonito como el de El Ilusionista.
Adoro rulo y la contrabanda pero no pongo ninguna pega en escuchar tanto extremoduro como michael nyman.
Actuo primero, pienso después. Mi mayor placer es dejar las cosas a medias.

danielespinosa.

¿Sabes? Eso de que el tiempo hace el olvido. Odio esa frase. Tal vez porque creo que es la verdad más grande que haya existido nunca. Por unos años, crei que tu eras la gran excepcion con esa regla. Por unos años, crei que eras neutro, como lo eres con tantas cosas. Por una cosa de las muchas que he perdido en la vida, puedo decir con una sinceridad enorme, que siento haberte perdido, que siento no poderte llamarte ya mejor amigo. Hay una cosa que nadie podra arrebatarme nunca, las incontables tardes que he pasado contigo, sin verguenza, sin temor a nada, contigo todo era tan sencillo como respirar. La pena esque se han quedado ahi, en la gran bolsa de los recuerdos. De vez en cuando, abro esa bolsa, y los recuerdos me abruman, por el hecho de que nunca mas volveran.

¿Sabes? Realmente no sé si merece la pena luchar por tí.

Sí es cierto que siempre hay que luchar por lo que quieres, por aquello que más deseas, pero sabiendo que es tan difícil...

Sí, puede ser que me venza el miedo, o quizá me puede la idea de que tarde o temprano me harás daño, y no merece la pena luchar en vano. Pero... ¿y si no es así? Quizá luchando consiga ser tu primer pensamiento por las mañanas, que el color de mis ojos sea tu favorito, y que mis besos curen todas tus heridas del pasado, del presente y del porvenir.

Sí, definitivamente, luchar merece la pena.

Todavia no he conseguido pintar un arco iris.

Llegan tan deprisa y se van tan pronto.... No he tenido el tiempo suficiente para capturarlos, solo un poquito de azul por aquí o de morado por allá y vuelven a desaparecer.
Vuelven al aire.

En verdad, odio la ciudad.

Pero tampoco querria irme a ningún pueblo existente.
Quiero inventar un mundo, un universo, pequeño, muy pequeño, con paisajes como esos cuadros que cuando les ves dices: joder, que bonito.
Exactamente, quiero vivir en un cuadro, en el que el color predominante sea el azul limpio del cielo, con nubes a las que yo dar la forma que quiera, y debajo, debajo de mi una hierba verde, con mariquitas a las que contar los puntos. Una brisa ligeramente fresca, de esas que te mueven el pelo y cierras los ojos para disfrutarla mejor. Quiero un silencio absoluto, tan absoluto que cuando me duerma, nada me despierte, si acaso, el sonido de la hierba al crecer. Un sol, caliente pero no irritante. Ni una preocupación.
Un paraiso, una ilusion, una fantasia?
Probablemente.

Virgen de la locura, nunca mas te voy a rezar

que me he enterado de los pecados que me quieres quitar.

Sístole, Diástole

Te juro que mi intención en el primer momento que le vi no era quererle.

No fue un flechazo, mas bien fue todo poquito a poco, como un castillo de naipes, cada día, a base de paciencia, cariño y esfuerzo ponía una carta mas en mi castillo, hasta que ese castillo, a pesar de ser de naipes, a mi me parecía tan solido y fuerte como una muralla. La pena, esque me he quedado encerrada en este castillo, en mi propio castillo, sigo queriendole como el primer día, tal vez incluso mas porque no hay mas verdad que lo de: uno no sabe lo que tiene hasta que lo pierde. 

Enfin, de momento, el unico consuelo que me queda esque tengo 14 años y que al final todo se desintegra, tanto los naipes como la piedra.

Odio el verano de Madrid, y el inverno de Burgos.

El sudor y pelo pegado de uno, y los escalofrios del otro.
Adoro las noches en las que me asomo a la ventana y respiro un aire fresco, pero no frio, el olor de primavera, y esos domingos tan especiales en los que lo unico que me despierta son los primeros rayos de sol, trepando por el edredón.
Podria pasarme horas escuchando por telefono los preciosos textos de Virginia, los amores y desamores de mi Cake y los suspiros de Elena.
En mi opinion, la pelicula mas bonita del mundo, superando al mismisimo Titanic (mis disculpas, James) es El Ilusionista, creo que cada vez que la veo, lloro más aún, como si fuera la primera vez que la viese!
Un libro? Las luces de septiembre, de Carlos Ruiz Zafón, ¡envidio la sensibilidad y perfeccion con la que escribe este hombre!
Me enamoro de cualquier sonrisa blanca y sincera, y adoro verle como se sonroja y baja la mirada cada vez que hablamos.

posdata: he decidido que le voy a olvidar!!
reposdata: nadie puedo decir ahora te olvido y ya está.

M.

Dios en el que no crees, no sabes lo que te echo de menos.

A la luna se la ve el ombligo.

Ojalá me hubiera dado cuenta antes.
No siempre lo urgente es lo importante.
Tal vez son las brujas, tal vez el destino.
Pero yo siempre me pierdo en el mismo camino.
Siempre en el mismo camino.